El terrible olor de las axilas, incluso poco después de ducharse: hay una explicación científica, y un remedio
Axilas malolientes: la explicación científica del fenómeno.
Los malos olores personales son uno de los fenómenos más desagradables que pueden darse, porque crean vergüenza e incomodidad social, especialmente cuando se producen en entornos públicos. Las axilas malolientes son probablemente una de las peores afecciones a las que hay que enfrentarse, sobre todo en épocas de calor, cuando las axilas suelen estar expuestas y es cuando menos se puede disimular el olor.
La gente tiende a pensar erróneamente que la causa del mal olor de las axilas se debe a la sudoración: las personas que sudan mucho son más propensas a sufrir este problema. En realidad, la sudoración puede ser uno de los factores, pero no el único. Al parecer, el mal olor puede deberse a la presencia de bacterias en la piel.
Las bacterias están siempre presentes en el cuerpo humano. Hay bacterias cutáneas, que están presentes en la piel, y bacterias internas, que se encuentran dentro de los poros de la piel. Las bacterias externas no causan problemas y, de hecho, tienen un efecto positivo en el cuerpo humano. Las que causan más daño son las llamadas bacterias comensales.
Bacterias comensales: ¿hay un remedio para limitar los daños?
Las bacterias comensales pueden causar olor en las axilas, ya que tienden a convertir ciertas sustancias del sudor en un olor desagradable. Concretamente, es la presencia de ciertas sustancias las que pueden, si están en grandes cantidades, hacer perceptible el mal olor, como por ejemplo:
- ácido isovalérico
- ácido isocaproico
- metilfenol
Entre las bacterias que más inciden en el fenómeno del mal olor de las axilas se encuentran:
- Staphylococcus hominis – convierte los ácidos grasos presentes en sustancias volátiles que causan olor
- Staphylococcus epidermidis
- Corynebacterium
También existen otras bacterias que provocan precisamente pequeñas infecciones de la axila humana y foliculitis, dando lugar a fenómenos malolientes persistentes. Sin embargo, se trata de situaciones límite, que suelen darse en personas que ya padecen determinadas enfermedades.
En cualquier caso, existen pequeños remedios preventivos para evitar el mal olor axilar, basta con tener un poco de cuidado.
Cómo prevenir el mal olor
Algunos consejos para evitar el mal olor de las axilas:
- mantener siempre las axilas limpias y secas – incluso después de ducharse, asegúrate de secarlas bien y evitar la acumulación de humedad;
- utilizar ropa transpirable, como algodón o lino. De este modo, el sudor se absorbe y puede evaporarse;
- evitar el uso de productos perfumados en las axilas, ya que pueden alterar la composición bacteriana y sólo provocan más olor. Se recomiendan productos que impidan la formación de bacterias.